Hagamos de cuenta.

Se sentó en la mesa del café Fawkes, sintió el aroma, tomó un sorbo y luego dijo:

Hagamos de cuenta que nunca pasó nada, podemos hacer de cuenta que todo sigue igual que antes, podemos hacer de cuenta que nunca dejé a nadie, que nunca me abandonaron, que nunca me sentí solo, podemos hacer de cuenta que todo puede mejorar, que el día de mañana puede traer nuevas esperanzas, podemos hacer de cuenta que existe la fe, podemos hacer de cuenta que hay alguien mirando, y que ve todo lo injusto, que tiene en cuenta nuestros sacrificios, podemos hacer de cuenta que no hay problemas, o que las soluciones son simples, y que siempre son las correctas, podemos hacer de cuenta que ser feliz es no es algo difícil, podemos hacer de cuenta que actuamos tal cual hablamos, que vamos a seguir nuestros ideales a muerte sean cuales sean los finales, podemos hacer de cuenta también que los finales son siempre felices, que siempre se consigue eso por lo que uno luchó tanto tiempo y tan duro, podemos hacer de cuenta que todos tienen en cuenta a todos, y que pensamos cuidadosamente cada movimiento antes de hacerlo, fijándonos en no lastimar a nadie. Podemos hacer de cuenta que no existe el miedo, y que cada vivencia nueva es algo que solamente aumenta nuestro conocimiento, que no podemos fallar, que no existe el error, podemos hacer de cuenta que existe el olvido y simplemente podemos suprimir esos recuerdos que nos afectan tanto, podemos hacer de cuenta que no existe la muerte, y que tenemos todo el tiempo del mundo para arreglar nuestros errores, es más, podemos hacer de cuenta que no existe el tiempo, que no existe el poder, que no existe el odio, que no existen cada una de esas cosas que corrompen día a día a las personas.


Pero, siempre estaríamos haciendo de cuenta, si todo sería así… no se llamaría vida, y realmente… ¿tendría sentido vivirla?
Fawkes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario